Presentada la segunda edición ampliada de las memorias de Pepe Gutiérrez
El Salón de los Espejos del Círculo Lucentino fue el escenario anoche de la presentación de la segunda edición ampliada de las memorias del que fuera primer alcalde de la democracia en Lucena entre 1979 y 1987, José Gutiérrez Luque, fallecido el 24 de septiembre de 2002, tituladas Pepe Gutiérrez, una vida de entrega y honradez.
La ampliación cuenta con una nuevo capítulo escrito por su hijo Jesús Gutiérrez Molero, con el título “Ventidós años en presencia del Padre”, y un nuevo prólogo cuyo autor es el sacerdote Alfonso Maestre Sánchez.
A su vez, Maestre Sánchez fue uno de los cuatro presentadores del libro, encargado en su caso de hablar de la faceta cristiana de Pepe Gutiérrez, destacando su compromiso con el movimiento de los cursillos de cristiandad.
Los otros presentadores fueron Juan Parejo Pineda, quien explicó la importancia de Gutiérrez en la santería lucentina, donde marcó un antes y un después en la forma de santear aportando un estilo nuevo caracterizado por el porte y la elegancia en el vestir; Mario Flores Martínez, que se ocupó del aspecto político del recordado primer edil lucentino, con el impulso económico que dio a la ciudad desde la Alcaldía, su apuesta por las políticas sociales con la construcción de 680 viviendas de protección oficial o la modernización del viario de Lucena, entre otros logros. Y de la vida familiar de Pepe Gutiérrez habló uno de sus nietos, que lleva su mismo nombre.
Previamente, como presentador del acto, intervino Jesús Gutiérrez, quien resaltó que su madre, María Sierra Molero Santos, fallecida el pasado 23 de julio, fue el gran apoyo de su padre. Precisamente una frase de ella cuando su marido falleció en 2002, “qué bueno ha sido para todos”, motivó que su hijo Jesús decidiera acometer el proyecto de reeditar las memorias de Pepe Gutiérrez ampliándolas con el capítulo “Ventidós años en presencia del Padre”, en el que pone negro sobre blanco el reencuentro de sus padres en el cielo con el que ha soñado como hijo.
Jesús Gutiérrez también quiso recordar las palabras que en su momento le dedicaron a su padre algunas personalidades, como por ejemplo el columnista de Diario Córdoba Manuel Sánchez Blanco, que alabó la entrega y vehemencia de Pepe Gutiérrez en la fe, o Miguel Castillejo Gorráiz, presidente de Cajasur entre 1977 y 2005, el cual definió a Pepe Gutiérrez como “un hombre bueno, que brilló con luz propia y fue apóstol por amor a Dios en los hombres y en los más necesitados”.